En un claro acto de corrupción, el alcalde de Motul, Roger Rafael Aguilar Arroyo, aprobó tres contratos por un total de 10.8 millones de pesos en un solo día, para la rehabilitación de calles. Dos de estos contratos beneficiaron al empresario José Julián Cetina Burgos, con quien el alcalde tiene un vínculo de compadrazgo desde su primer trienio.
Las recientes lluvias han puesto de manifiesto la deficiente calidad del trabajo realizado en 2021, ya que, a tan solo ocho meses de su finalización, han comenzado a aparecer baches y otras irregularidades en diversas calles del municipio. Durante su primer mandato, la ambición del presidente municipal fue evidente, y tras su reelección, los actos ilícitos continuaron. El 19 de noviembre de 2021, firmó contratos a favor de las empresas Herrecon, Desarrollo y Construcción, así como Constructora e Inmobiliaria Arknova, ambas sociedades anónimas de capital variable.
Aunque se llevaron a cabo licitaciones públicas, estas resultaron ser un mero teatro para ocultar la falta de competencia real. Con estos contratos, el alcalde logró una ganancia sustancial de 10 millones 780 mil 622 pesos, provenientes de recursos federales del Ramo 33, a cargo del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Municipal (Fasim) del ejercicio 2021. Desde el inicio de su segundo trienio el 1 de septiembre de 2021, Aguilar Arroyo comenzó a favorecer a quienes lo apoyaron durante su campaña electoral.
Conclusión: La situación en Motul pone de manifiesto un preocupante patrón de corrupción y nepotismo, donde los intereses personales del alcalde prevalecen sobre las necesidades de la comunidad. Es fundamental que se investiguen estos actos y se tomen medidas para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas en la administración pública.
