• En la carretera 307 Cancún-Chetumal, cerca de la localidad de Akumal, entre Playa del Carmen y Tulum, se registró otro trágico incidente para la conservación de los jaguares (Panthera onca).

En la carretera 307 Cancún-Chetumal, cerca de la localidad de Akumal, entre Playa del Carmen y Tulum, se registró otro trágico incidente para la conservación de los jaguares (Panthera onca). En esta ocasión, un jaguar macho fue atropellado, sumándose a una serie de incidentes que han ocurrido en la misma vía en los últimos meses.

El cuerpo del jaguar fue rescatado a tiempo por miembros del Jaguar Wildlife Center, una asociación civil dedicada a la protección de esta especie en peligro de extinción. Sin embargo, el incidente no estuvo exento de complicaciones, ya que unas personas no identificadas intentaron llevarse el cuerpo en una camioneta antes de la llegada de los rescatistas.

Raúl Padilla, integrante de la asociación, expresó su preocupación ante el aumento de atropellamientos en la carretera federal 307, que se ha convertido en una de las más peligrosas para los jaguares. Según Padilla, desde septiembre de 2022 hasta la fecha, se han reportado cuatro de los cinco felinos muertos por atropellos en esta vía. El quinto falleció en una carretera que conduce hacia Solferino, en el municipio de Lázaro Cárdenas.

Entre los jaguares atropellados, se destacan una hembra lactante, impactada el 30 de septiembre en Punta Venado; otra hembra gestante, atropellada cerca del hotel Nickelodeon; y el cuarto jaguar, cuyo cuerpo fue robado, encontrado a la salida del municipio de Felipe Carrillo Puerto rumbo a Mahahual. Estas cifras son solo los casos conocidos, ya que algunos incidentes podrían no haber sido reportados.

El jaguar, el felino de mayor tamaño en América y el tercero a nivel mundial después del tigre y el león, se encuentra clasificado como una especie Amenazada en México según la Norma Oficial Mexicana 059 (NOM-059). Además de los atropellamientos, esta especie enfrenta diversas amenazas en la región, incluyendo la deforestación debido a la expansión urbana, la fragmentación de su hábitat y la caza furtiva para el comercio ilegal de su piel.

El desarrollo de infraestructuras en el hábitat del jaguar también representa una amenaza creciente. El proyecto del Tren Maya, un ferrocarril interurbano que atraviesa la Península de Yucatán, se señala como un factor que aumenta el acceso humano a áreas antes aisladas, exponiendo a los jaguares a nuevas amenazas. Los trabajos del Tramo 5 Sur del Tren Maya se están llevando a cabo en las cercanías de la carretera donde ocurrió el reciente atropellamiento.

Raúl Padilla enfatizó que el desmonte de los megaproyectos y la falta de planificación en cuanto a la colocación de pasos de fauna están forzando a la fauna silvestre, incluyendo a los jaguares, a desplazarse de manera inusual. La construcción de carreteras sin considerar la prevención de atropellamientos y la fragmentación del hábitat están poniendo en riesgo la supervivencia de esta icónica especie.

La conservación del jaguar requiere de esfuerzos conjuntos por parte de autoridades, organizaciones civiles y la sociedad en general. Se deben implementar medidas para proteger su hábitat, como la creación de pasos de fauna y la planificación adecuada de los proyectos de desarrollo. Solo así se podrá garantizar un futuro seguro para los jaguares en México y preservar la riqueza de nuestra biodiversidad.

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