Hace un tiempo se empezó a usar el término socavón como referencia a las afectaciones directas por falla natural geológica, actualmente la Riviera maya se ha visto afectada por dos socavones, el primero sobre la carretera federal en el tramo Cancún-Playa del Carmen, a la altura de Playa paraíso y el segundo en el tramo de Playa del Carmen-Tulum, a la altura de Puerto Aventuras.
Para comprender esta situación de una mejor manera es importante recordar que la madrugada del 27 de agosto del 2015, se hizo un reporte a las autoridades estatales y federales, donde se señaló que en la carretera federal 307 Cancún-Playa del Carmen se había fracturado y presentaba daños en su estructura de aproximadamente 12 metros de longitud con una profundidad de 2 metros, lo que no permitía que el transito pueda circular de la manera habitual.
El 4 de febrero, volvieron a presentarse afectaciones a pesar de que ya había sido estudiado, rellenado, construido y habilitado como un tramo carretero, lo que dio lugar a que se cerrarán nuevamente los carriles centrales.
El 13 de junio del 2020 apareció una caverna acuática la cual se desplomó en el tramo Playa del Carmen-Tulum, a la altura de Puerto Aventuras.
Actualmente la circulación donde están ubicados los socavones de Cancún a Tulum se ha visto afectada en su totalidad, ya que es la única vía de comunicación terrestre con la que cuenta este corredor turístico, ocasionando largas filas de automóviles que llegan a durar hasta 2 horas
Los quintanarroenses se están viendo afectados por los dos socavones ya que les han traído pérdidas económicas, de tiempo y de trabajo en la región, un problema que cada día se acrecienta y parece no tener solución.